El deseo sexual sin amor existe.
Este se produce a veces con personas que no tenemos cerca, que vemos en películas, revistas o con aquella persona que una noche te entregó sus encantos carnales y ya no os visteis más.
Podemos querer a una persona simplemente por pura atracción sexual.
Esa persona con la que no vivirías todos los días porque no te gusta su forma de ser, o no es tu pareja ideal pero por la que removerías cielo y tierra con tal de saciar tu hambre sexual, porque otra cosa no tendrá, pero en la cama es una fiera.
Sí tu enamorado sexual no es George Cloney no pongas fotos, sólo recuerda aquella vez en la que echasteis el mejor polvo de vuestra vida.
Porque debajo de cada pantalón, o de cada sujetador o vestido, se esconde un cuerpo que puede hacerte gozar, aunque la cara que le acompaña no es preciosa, y su ropa interior sea como la de tu abuela.
El deseo sexual produce un placer indescriptible. Soñar con ese pene de tamaño extremo que te hizo encadenar varios orgasmos, o con esos pechos de dimensiones increíbles que tiene la chica de esta revista... Cada cual tiene sus fantasías y sus deseos.
Llena tu mente de todas vuestras experiencias, tanto si han ocurrido con una modelo de revista y cada vez que la ves te excitas, o con el actor macizo de la serie de prime time. Siente ese deseo para calmar tu apetito sexual, escribe relatos sobre lo que tu mente imagine o recuerde sí de verdad hubo sexo. Porque si el deseo se basa en una experiencia carnal donde los cuerpos se sienten, solo tienes que recordar y es mucho mejor.
Sí hubo revolcón, desearás cada día repetirlo, tal como fue y pensarás que nadie te saciará de igual manera. Pero todo es cuestión de buscar, sí se quiere, a un varón superdotado y experimentado o a una mujer que sepa moverse, que tenga grandes pechos, que por su vagina entre un tren bala.
Sí no tienes pareja habitual, o tu relación no funciona a las mil maravillas, este deseo será un gran remedio para por ejemplo conciliar el sueño, mejorar el cutis y por supuesto ser más feliz.
Ahora, eso sí, jamás de los jamases, estés haciendo el amor con tu pareja y se te ocurra decir que te estás corriendo deseando a otr@, porque te buscas la ruina.
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